Cuando uno mismo se dice : No más ; se da el lujo de ser inconstante.
Se da el gusto de violar su propia palabra.
Pero cuando es lo perseguido quien dice : No Más.
Pues No Más.
Nunca Más.
Y así con toda la humillada del caso, es un No Más definitivo.
Un No Más inviolable .
Un No Más con un punto al lado.
No Más.
Se da el gusto de violar su propia palabra.
Pero cuando es lo perseguido quien dice : No Más.
Pues No Más.
Nunca Más.
Y así con toda la humillada del caso, es un No Más definitivo.
Un No Más inviolable .
Un No Más con un punto al lado.
No Más.