miércoles, 22 de abril de 2015

Después de tanta sinceridad viene la necesidad de exhibición.

Cuando se escribe sin pretensiones uno logra una introspección casi que perfecta.
El latido del corazón va haciendo juego con cada idea, con cada palabra, con cada frase,
Las letras comienzan a ser como espejos de cada tormenta, de cada desespero, de cada anhelo, de cada esperanza que en uno se encuentra.

Pero claro, si se hiciera público todo lo que uno escribe con la previa motivación de guardarlo para sí,  se vería distorsionada la transparencia de lo que somos por la posibilidad de un espectador.

Mira lo que se avecina a la vuelta de la esquina viene Diego rumbeando.



lunes, 20 de abril de 2015

¿Recuerdas cuando la felicidad estaba al alcance de mis manos jugueteando sobre los pedazos de lluvia recién caídos sobre los carros?

¿Recuerdas cuando íbamos descubriendo nuevos sabores de dicha, en lo simple, en lo sencillo, en lo absurdo?

Pues ahora la felicidad nos saluda de lejos, mientras caminamos con nuestro millar de líos, nos saluda de lejos y nos invita a que la probemos, que la probemos de nuevo como la solíamos probar, con nuestro sentido agudo del gusto. Un gusto que el exosto (la ache se me escapa en la duda) ahumado y molesto de la vida nos ha distorsionado.

Prueba una bocanada de felicidad. Pruébala. 

La vida vale la pena lucharla de tu mano. 

domingo, 19 de abril de 2015

Bird

La vida es esto.
La vida es ver lo que no veíamos en el momento que no esperamos.

Hay situaciones a las que no le comprenderemos su completo significado hasta que los años pasen y nos enseñen el por qué.

Para encontrarse hay que abandonarse una y otra vez. Una y otra vez.
Son las alas que van recogiendo poderío en las situaciones con mala cara.

Las palabras se me escapan de entre los pensamientos, se escurren, como si no quisieran ser capturadas, como si no quisieran ser recordadas, como si supieran que este dolor no es digno de ser evocado en líneas.

Estoy hecha de amor y pasión y de ganas de vivir.
Estoy hecha de ganas de derrotar.
Estoy hecha de vida.

martes, 14 de abril de 2015

S

Si te contara cuán difícil es que una lágrima se asome por mis ventanas. 
¡No lo creerías!  

La soledad que martirizó mis pies mientras tocaban el pasto, la soledad que solía susurrarme tormentas de mentiras pueden ser las manos de Dios cuando necesitamos despegar el corazón de miedos pegachentos. 

Me encanta la osadía con la que andas por la vida, siendo la fuerza de tu debilidad. Caminando con paso pertinente y mirada que penetra en la eternidad de los ojos celestiales que has conocido y han sido tu dicha. 

Si me preguntas quién soy, te diré que soy una hija con sonrisa de diamante, no sé y de wolframio. ¡Mírame! 

Soy tan hermosa... 
con mi espada, como toda una guerrera, tumbando tus mentiras. 

Desea

A veces hay mucho más que desear, más que un abrazo o que el dulce sabor de un beso de amor verdadero.
A veces hay algo más que desear, más que sentir, más que ver una herida que ya no duele más. 

A veces hay algo más que desear, más que el anhelo cansado y despreciado que ha andado buscando ser en donde no debe. 

A veces hay algo más que desear que encontrar el espejo de quien somos en el ojo al que le falla la capacidad para reconocer la belleza. 

No veas más para atrás, mujer mía. 
No te atrevas a ver más para atrás. Éso es arrastrar los años, arrastrarlos por un abismo de imposibilidades espacio- temporales. 

Hay mucho más que desear, desea algo diferente, que me duele ver cómo te pierdes deseando todo menos lo debido.